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Terapia ocupacional para pacientes con enfermedad de Parkinson

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La enfermedad de Parkinson es una enfermedad neurodegenerativa, progresiva y discapacitante. Estas limitaciones se ven reflejadas en las Actividades de la Vida Diaria, repercutiendo en la calidad de vida de los afectados y de sus familiares.

El rol de los terapeutas ocupacionales es apoyar a los pacientes con enfermedad de Parkinson y ayudarles a mantener su nivel habitual de actividades de cuidado personal, laborales y recreativas durante el mayor tiempo posible.

Sus síntomas

Las alteraciones a nivel motor que más repercuten en la vida diaria del paciente con enfermedad de Parkinson son el temblor, la rigidez muscular, enlentecimiento del movimiento, dificultad para iniciar el movimiento, movimientos involuntarios relacionados con la medicación, el trastorno del equilibrio y de la postura y disminución de la expresividad de la cara. Estas alteraciones provocan una serie de cambios a nivel en la función como por ejemplo:

– Pérdida de la movilidad de las extremidades y de los movimientos rotatorios del tronco.

– Tendencia a la flexión y rotación hacia adentro de los hombros que provoca cambios de postura.

– Extensión y rigidez en las muñecas.

– Flexión de las articulaciones de la mano.

– Extensión de las falanges.

Todas las alteraciones propias de la enfermedad de Parkinson repercuten directamente en las capacidades funcionales provocando:

– Dificultad para realizar actividades con las dos manos.

– Dificultad para realizar movimientos repetitivos.

– Dificultad en la comunicación escrita a mano.

– Dificultad en la realización de actividades que precisen coordinación motora gruesa.

– Dificultad en la realización de actividades que precisen coordinación motora fina y destreza

– Dificultad en las prensiones y agarres.

Los objetivos de la Terapia Ocupacional en estos casos se pueden resumir en:<

– Mantener la máxima independencia en las actividades funcionales para prevenir limitaciones articulares debido a la rigidez o el temblor.

– Mantener el movimiento articular y prevenir contracturas musculares.

– Estimular el aumento de la velocidad y la coordinación de los movimientos.

– Adaptar los objetos de uso cotidiano cuando sea necesario.

– Asesorar, orientar y entrenar sobre las ayudas técnicas cuando sea necesario.

– Favorecer la realización de movimientos amplios y rítmicos.

– Ayudar a evitar los movimientos en bloque.

– Mantener las capacidades que aún conserva.

– Mejorar y/ o mantener la destreza y habilidades manuales.

– Mejorar y/ o mantener las habilidades cognitivas.

– Entrenar y/ o adaptar la comunicación escrita.

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